El agua es un recurso natural esencial para el desarrollo de las diferentes formas de vida que habitamos en el planeta Tierra. El agua, al mismo tiempo que constituye el líquido más abundante en la Tierra, representa el recurso natural más importante y la base de toda forma de vida, ya que es un elemento vital para el desarrollo sostenible, pues juega también un papel fundamental en la reducción de la pobreza, el crecimiento económico y el equilibrio ambiental.